En la recta final hacia la primera instancia de definición del escenario electoral de este año, las negociaciones entre Sergio Massa y el kirchnerismo para conforman una alianza que enfrente a Cambiemos están avanzadas. Anoche, aunque con fuerte hermetismo, en ambos campamentos se especulaba con que el anuncio formal podría llegar en las próximas horas. Mañana miércoles, se vence el plazo para que todas las fuerzas que participarán de las PASO de agosto presenten ante la Justicia Electoral la conformación de las alianzas. Esa será la instancia en donde primero se plasmará el acuerdo sobre el que el propio Massa y su círculo más íntimos de dirigentes de confianza continuaba negociaando anoche con el Instituto Patria. Todo indica por estas horas que ante la Justicia Electoral se anotará el frente que integrarían el PJ, el Frente Renovador y los partidos que componen el Frente para la Victoria. Luego, se abrirá una nueva ventana de negociaciones antes del próximo sábado 22 de junio, fecha límite para la presentación de las candidaturas. Hasta entonces habrá tiempo para dilucidar lo que parece ser hoy el principal interrogante: cómo y en qué términos terminará de cobrar forma el acuerdo. Es decir, si Massa, como él pretende, mantiene su candidatura presidencial y se enfrente a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández en las PASO o si bien depone su postulación presidencial y privilegia la negociación por espacios en las listas de diputados nacionales y legisladores bonaerenses. En ese último caso, algunas versiones apuntan que el tigrense podría ocupar él mismo un lugar en la boleta de candidatos a diputados nacionales. La opción de ir a una PASO contra la fórmula Fernández-Fernández es la que reclama Massa. En ese caso, el enfrentamiento sólo sería en la categoría presidencial, ya que abajo