Política

Provincia acatará las nuevas medidas que tome Nación

La Provincia manifestó su disconformidad por el último DNU. El aumento de casos de coronavirus impulsa las nuevas restricciones de Alberto Fernández.

  • 20/05/2021 • 08:10

El aumento de casos de coronavirus puso en alerta tanto a la Provincia como al Gobierno Nacional, que busca ampliar las restricciones sanitarias y evalúa seriamente la implementación de una fase 1 en el AMBA durante los fines de semana

En ese contexto, la Provincia de Buenos Aires adelantó su postura: acatará las medidas que decida y anuncie Alberto Fernández, y las adaptará al sistema de fases vigente. Lo hará con la disconformidad que todavía persiste en Kicillof por el último DNU "blando", y con cuestionamientos al Gobierno porteño.

"Desde hace semanas que venimos sugiriendo medidas, incluso antes del último decreto. Y ahora lamentablemente vemos que está pasando lo que dijimos que iba a pasar si no se tomaban esas medidas", se lamentó ante INFOCIELO un vocero de Gobernación.

En efecto, tres semanas atrás la Provincia pidió aumentar las restricciones para sostener el descenso de la curva de casos de coronavirus y, especialmente, aliviar la tensión del sistema sanitario. Desde Nación prefirieron sostener las medidas vigentes. Kicillof las acató, pero manifestó su disconformidad y advirtió que 10.000 casos diarios era, para él, "inaceptable".

La curva de casos de coronavirus en la Provincia había bajado, pero la última semana volvió a aumentar.

La curva de casos de coronavirus en la Provincia había bajado, pero la última semana volvió a aumentar.

Tres semanas más tarde se puede apreciar por qué el enojo del Gobernador: las medidas que acató de Nación frenaron el descenso que mantenía el AMBA, a los que se sumó el aumento de casos de coronavirus en el interior de la Provincia. El resultado, un promedio de 9.322 casos diarios, y 14.250 en los últimos dos días.

La curva de casos de coronavirus en el AMBA se amesetó. En consecuencia la ocupación de camas de terapia intensiva, que había marcado un leve descenso, se estabilizó en valores "altos" alrededor del 76%, y mantiene en tensión al sistema de salud.

"Siempre hicimos hincapié en la necesidad de tomar medidas en conjunto en el área del AMBA, cosa que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires optó por no hacer", reprochan en la Provincia. La relación tripartita tuvo sus idas y vueltas. Y aunque se sostiene, la discusión por el tema clases presenciales, fuertes restricciones y controles en los accesos, generó cortocircuitos entre Kicillof y Larreta.

En el entorno del Gobernador entienden al Área Metropolitana de Buenos Aires como una sola área epidemiológica, y creen que las medidas que tome -y sobre todo las que no tome- Horacio Rodríguez Larreta, afectarán al conurbano bonaerense. En ese sentido, lamentan que no hay una misma visión.

En medio de un año electoral, la tensión es mayor: aunque la pandemia quedó fuera de la grieta política, y hasta ahora se respetó esa "tregua", sí hubo polarización con los temas que la rodean: vacunas, clases presenciales y demás restricciones. Por ese motivo es que cambiaron la estrategia: desde el DNU anterior, la Provincia prefirió subordinarse a las medidas que tome la Nación.

El Presidente tiene un boceto de las medidas que implementará en la continuidad de la cuarentena. Los datos muestran que ni las restricciones vigentes ni la campaña de vacunación a nivel nacional alcanzan para frenar la segunda ola. Por eso esta vez habrá medidas más fuertes. A la posible fase 1 en el AMBA durante los fines de semana se sumarían importantes restricciones en todo el país.

A diferencia del año pasado, esta vez se busca apuntar las restricciones a jurisdicciones más pequeñas que se encuentren en una situación de crisis epidemiológica. Por ese motivo, Alberto Fernández espera la reunión con los gobernadores para terminar de definir el nuevo decreto. En Casa Rosada hay una misma opinión: "esto no da para más".