Nada más poderoso que el voto en una democracia y eso quedó demostrado el domingo. Grande puestas en escenas, focus group, trolls, Clarin y La Nacion, los conversos Leucos y Majul, consultoras y encuestadoras, etc, etc etc. Todos convertidos en insignificantes y ridiculizados por un sobre y una boleta electoral. En realidad por miles y miles puestos en sintonía. El domingo paso algo genial: la realidad le pego en la cara a un gobierno autista. El voto popular, por más que enoje Macri y la su base se sustentación: la UCR, los despertó con un baldazo de agua helada. Es patético verlos hacer demagogia y populismo a los predicadores del Cambio. Aplicar la ley de desabastecimiento que tanto los horrorizaba y con la cual endemoniaban a Guillermo Moreno los pone en ridiculos, situación de la que no se vuelve. Cinismo puro del presidente al decir “sabíamos que la gente no llegaba a fin mes, les exigimos demasiado”. O sea aplicaba un concepto propio de nuestra argentinidad : SI PASABA, PASABA. Pero NO PASO. Golpeados, endeudados, tristes y desesperanzados los argentinos esperaron en silencio, callados. Cuando les tocó a ellos actuar, cuando los que no están en los set de TV o no tienen aire en las radios, los que estudian y laburan fueron a llamados a cumplir su rol, mostraron su enojo. No fue una emboscada , no esperaban agazapados detrás de los árboles, eran silenciosos pero gritaban, estaban ahí a la vista de todos, en cada una de las Pymes q cerraban, en cada crédito usurero al q debían recurrir, en cada jubilado sin medicamentos, en cada chico sin clases. Ahí a la vista de todos menos DEL GOBIERNO. Ahora hacen lo que no están convencidos por una cuestión electoralista, más humillante todavía. Como ellos mismos pregonaban los Argentinos no volvemos hacia atras, los argentinos ya elegimos y vamos a volver a hacerlo en el mismo sentido. Por fin la democracia mostró su arma más letal: EL VOTO POPULAR. Daniel Spadone.