Apenas pisó las puertas de la Casa Rosada, el médico que atendió durante el último tiempo al astro argentino fue rodeado por la prensa nacional e internacional. Leopoldo Luque lo había operado de un hematoma subdural durante los primeros días de noviembre y evitó dar mayores precisiones ante las preguntas de los periodistas. “Estamos acompañando permanentemente a la familia, estamos todos muy dolidos por esta perdida. Es una perdida a nivel mundial de una persona invaluable. Nada mas para decir”, dijo Luque privo a entrar a la Casa de Gobierno.  Y remató: “Siento un profundo pesar”. El nombre de Leopoldo Luque quedó en el foco de la escena durante las últimas horas luego del duro comunicado que emitió Matías Morla, el abogado que estuvo a cargo de los temas legales del Diez durante su último período. Allí, aseguró: “Es inexplicable que durante doce horas mi amigo no haya tenido atención ni control por parte del personal de salud abocado a esos fines”. Además, catalogó como “criminal idiotez” que la ambulancia demoró “más de media hora en llegar”. Ante estas críticas, Luque optó por guardar silencio ante los medios. “Hablo directamente con la familia, estamos en contacto con ellos”, aclaró. “Perdón, sepan disculpar pero no voy a dar más declaraciones”, anunció ante la insistencia de los periodistas presentes en el lugar.