La inflación desaceleró en julio y fue de 1,9%, según informó este jueves el Indec. De esta manera, tuvo una leve caída en relación a junio, cuando había sido de 2,2%. En términos anuales, la suba de precios cayó a 42,4% y marcó así siete meses seguidos en retroceso. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) terminó siendo menor al que habían estimado las consultoras privadas, que calcularon una inflación por encima del 2% mensual en tono con el mes anterior. Desde que comenzó la crisis sanitaria por el coronavirus y la actividad económica se vio restringida por la cuarentena, el ritmo mensual de inflación tuvo distintas tendencias. Primero, en marzo, aceleró hasta 3,3% luego de los primeros días de aislamiento social. En abril y mayo los precios se amesetaron y registraron aumentos de 1,5% mensual, mientras que en junio -en coincidencia con un mayor nivel de flexibilización de la cuarentena en distintas regiones del país- volvió a niveles superiores al 2% y cerró en 2,2%. Desde principio de año, la medición anual de la inflación viene en retroceso. Mientras en diciembre era de 53,8%, hacia julio recortó más de 11 puntos porcentuales y llegó a 42,4%. Las consultoras y bancos que participan del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central anticiparon que desde agosto podría haber un repunte inflacionario y que hacia noviembre, el rebrote podría alcanzar el 4% mensual. Muchos de los precios de referencia de la economía se encuentran congelados por la pandemia, como tarifas y combustibles. En los últimos días trascendió que el Gobierno permitiría una corrección de 7% en el valor de las naftas. La inflación, rubro por rubro En julio el sector con aumentos de precios más pronunciado fue Equipamiento y mantenimiento del hogar, con 3,9%. Le siguieron los rubros de Recreación y cultura y Prendas de vestir y calzado, que registraron ese mes un 3,3% de variación. Más atrás quedaron Servicios varios (2,3%) y Salud (2,2%) que incluye la medicina privada y el precio de los medicamentos. Restaurantes y hoteles, uno de los sectores más impactados por la pandemia, avanzó 1,9% y el Transporte 1,8%. Los alimentos y bebidas aumentaron en julio por debajo del promedio (1,3%). En ese contexto, los cortes de carne medidos por el Indec tuvieron incrementos elevados, de entre 2,8% para el caso del kilo de cuadril hasta 4,4% el kilo de asado. El kilo de pollo, por su lado, subió en julio 2,8% mientras que el filet de merluza lo hizo 5,5%. Otros artículos de primera necesidad tuvieron también aumentos por encima de la media como el pan de mesa (2,4%), harina (2,7%), fideos (2,5%), leche en polvo (4,6%), huevos (5%) y yerba (3,9%). Más sobre: Inflacion